Frida Khalo. Arte mexicano y emoción en el pincel. La historia de una vida difícil.
Arte, raíces y amor.
Hablar de ella es hablar de dolor, de vida y de muerte, de supervivencia emocional, de superación y de obsesión…
¿Quién no se ha enamorado hasta más allá de uno mismo? ¿Quién no se ha refugiado en el calor y en la calma de volver a su “casa azul”?
El arte de Frida, el reflejo de su vida.
El arte de Frida fue etiquetado de surrealismo en un principio, hasta que llegaban a conocerla en persona. Y ella acostumbraba a decir:
“No sé si mis pinturas son o no surrealistas, pero de lo que sí que estoy segura, es que son la experiencia más franca de mi ser”
La obra de Frida es una expresión narrativa y autobiográfica de su existencia, porque ella no pintaba sueños, pintaba algo más grande, su propia vida…
El folklore, el grave accidente, el momento de su embarazo perdido… Su débil estado de salud y la tortuosa relación con Diego Rivera, sirvieron de materia prima para su arte. El que le sirvió para canalizar sus emociones y conocer lo más profundo de sí misma.
Su obra es fiel reflejo de las emociones que todo ser humano experimenta por eso sentimos un pellizco en el corazón con algunos de sus cuadros, porque vemos algo proyectado de nosotros mismos.
Un amor tóxico.
Hija de madre mexicana y padre alemán. Frida nació el 6 de julio de 1907 en Coyoacán (México) en la conocida “Casa azul”.
Perteneció al primer grupo de 35 mujeres admitidas en la Escuela Nacional de Preparatoria donde conoció a Diego Ribera.
La relación tumultuosa de Frida y Diego ( con idas, venidas, infidelidades, pasiones y desventuras) es universalmente conocida. Y está lejos de representar la independencia que cabría esperar de un icono del feminismo actual.
Muestra la realidad a la que, quien más o quien menos, se ha enfrentado alguna vez, entre sus creencias y los pulsos de sus instintos…
“Donde puedas amar, no te demores”
Vida, pura y dura, sin ornamentos ni romanticismos, y con la que es fácil, sentirse identificado en algún momento de tu vida.
Puedes aprovechar la coyuntura para descubrir qué cuadro es el que te pellizca el alma y cuál puede ser el motivo…
Descubre a los más peques de la casa el arte de Frida Khalo con este vídeo que te trae Pepita Viajera.
